Estos días estuve instalando la versión estable de Debian en mi sobremesa y el primer problema que encontré es que los drivers incluídos en las repos no ofrecían soporte para mi gráfica, una GTX 960 que compré también recientemente.
Nada que no tenga solución, ya que podemos compilar los últimos drivers que Nvidia de todas formas. Vamos a ello:
- Descargamos los drivers de la web oficial de Nvidia. Seleccionamos en cada caso los datos correspondientes a tarjeta gráfica, idioma, sistema operativo… en mi caso selecciono GeForce 900 series, en concreto GTX 960 para Linux 64 bits en inglés.
- Una vez descargados, tendremos que apagar el servidor X. El procedimiento es cambiar de consola, por ejemplo a la segunda TTY con
Ctrl + Alt + F2. Yo estoy utilizando Gnome como entorno de escritorio, por lo que una vez ahí y como root paro el servidor X con lo siguiente:service gdm3 stop
Si utilizáis KDE probad con
service kdm stopo incluso conservice lightdm stop, dependerá de cada entorno de escritorio. - Paso importante: habilitar compatibilidad con arquitectura de 32 bits, ya que el driver de Nvidia instala librerías de 32 bits que utilizan determinadas aplicaciones (sin ir más lejos, Steam):
dpkg --add-architecture i386 apt-get update
- Instalamos todas aquellas dependencias y herramientas que nos van a hacer falta durante el proceso de compilación. En mi caso bastó con gcc, make y los headers del Kernel:
apt-get install gcc make linux-headers-$(uname -r|sed 's,[^-]*-[^-]*-,,')
- Damos permisos de ejecución al instalador de Nvidia y procedemos a lanzarlo:
chmod +x NVIDIA-Linux-x86_64-352.30.run ./NVIDIA-Linux-x86_64-352.30.run
Sobre las preguntas que nos puede hacer el instalador: si es alguna dependencia, procederemos a instalarla si es que nos falta. Instalad también las librerías de 32 bits si os lo pregunta y permitid que
nvidia-xconfigconfigure el servidor X para funcionar con los drivers privativos.
Una vez completado este proceso, reiniciad la distro con reboot y a disfrutar hasta que Nouveau esté a la altura…